Ya no comida sobre fauces
y sí rubor, e insistencia
(mío, tuyo, respectivamente)
Tal vez ya no autitos sobre espaldas de asfalto y luego arcilla,
ya no sueños y colores
o sí
pero transfigurados
Tal vez ya no le tenga miedo
a los mosquitos
a crecer
tal vez los abismos se vean como simples hendiduras en la tierra, desde aquí ahora
Tal vez ya no ésa ternura
pero otra, ¿por qué no?
Y, ojo,
sincerándome:
todavía me perturba la oscuridad
y eso me gusta
me deposita cerca de esos ratos en los que éramos poquitos
y ni soñábamos esto
y mirá vos...
nos hemos multiplicado.
¿Fuimos nosotros?
¿o el tiempo que siempre tira del brazo?
(felíz cumple, mami; no me alcanza la vida para encontrar palabras que te representen cabalmente; y al tiempo le digo: loco! ¿te pensás que somos de goma?)
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarOh, las madres.
ResponderEliminarHermoso.
Te invito a pasar por el mío recién nacido,
¡yo también soy madre ahora!
http://enciendolalampara.blogspot.com.ar/
Abi-gail