lunes, 18 de diciembre de 2023

Domingo 18.
Despedimos a Pablito.
La enajenación no rehuye al cementerio: deudos de celeste y blanco trasgreden los manuales de estilo.
La ceremonia se sucede respetuosa y profunda.
La expectativa es un plebeyo secreto a voces.

Llegamos a casa justito.
Se precipita el 2-0 y siento que el alivio es engañoso. Liquidarlo casi desilusiona.
De pronto resuena 2014 como fantasma de bajo vientre.
Y me lastimo en el 3-2.
Y hay penales.
Y el retrato de mi viejo no da abasto.

Temí que mi hermano del medio demoliera los cimientos de la casa.
Temí que todo fuese insoportable y perpetuo.
Pero no fue preciso reconstruir nada.
Esos pibes nos devolvieron algo que no tiene nombre y se sintió verbo.
Y desde aquel día se vive para recrear la sensación.




lunes, 26 de junio de 2023

Quiero una foto de nuestro amor
verte reír y sentir que no es hoy
última opción para tu corazón
solo un intento, rey o emperador

La calle te oculta de mi rubor
quiero mostrarme en todo mi esplendor
guardar para mí la inocencia de Dios
omnipotente, un gladiador

Quiero una muestra de tu sudor
Sobre mi piel y sentir que no soy
Solo otra opción para tu decisión
Acaso un momento, evento del hoy

La calle susurra por mi clamor,
quiero erigirme en fiscal del dolor;
guardar para ti mis vestigios de sol,
Tan impotentes, fragmentos de dos.

Quiero perderme
entre tus verbos
entre tus miedos
(tus miedos)
Simplemente lo que intento es
quererte

viernes, 2 de junio de 2023

La gata del yeso.
Así nos referíamos a aquella gata rubia que irrumpiría en nuestra vida como intrusa.
Aún sin vestigios de calle en el cuerpo, solía visitar el patio de aquella vieja casita de Calle 12, en aquel barrio con aspiraciones residenciales próximo a la estación Berazategui, mientras Lu se daba a los quehaceres necesarios en virtud de la mudanza que plot twist: no salvó la relación.

Una vez asentado Pedro en términos de amo y can del patio, Rubita se limitó a espiarnos desde los techos ya con su bracito vendado, acaso tejiendo estrategias de dudoso éxito en ese trajín de volver a pisar ese cemento aturdido disfrazado de baldosas rojas.

La clave fue una noche muy lluviosa: tras el rumor de la lluvia oímos un llanto inconfundible de gato y eras vos, Rubia, refugiada en la entrada del chalet más coqueto de la manzana, pues herida pero no tonta.
Volviste a entrar pero parcialmente, ya que la adopción cabal se dio en la noche de despedida de Bonito.

Para entonces La Rubi tenía ya su cucha en el techo de chapa del lavadero, lavadero que ofició de refugio de aquel otro gran y dignísimo gato, quien decidiera pasar sus últimos meses con nosotros.
Aquella noche decidí entrarla y allí estuvo Rubia, en nuestra ceremonia animal: el multitudinario velorio del Bono.

Entre millones de cosas, fuiste la excusa perfecta para prestarle atención especial a Mateo, que si requería de aquella no tenía más que trepar al mueble en el cual dormías y molestarte.
Fuiste estufita amarilla y quizás la gata más esponjosa jamás vista. Sí, claro, incluyendo a Janis. 
Fuiste la gata parlanchina que intenté sin quórum llamar Ana, que no aguantaba mucho pegote, ¡y así rajabas!
Fuiste la primer cruza entre gato y conejo, renguita de mi corazón que ni así frenabas💝.
Fuiste la perita que había que curar cíclicamente.
Fuiste de las cosas más dulces que he visto.
Fuiste refugio obligado cuando el corazón de Mateo dijo hasta acá.
Fuiste el dolor que costó sacarme cuando dejé de visitar aquel lugar que supo ser también mi hogar.
Fuiste los mensajes que nunca pude mandar, porque meterte a un depto. de Capital era cooptar tu destino de libertad.
Hoy me contaron que la Rubia dijo adiós. Podrá significar eso en mil sentidos, sí.
Jamás para nuestro corazón.
(Saludos a Matuqui ❤)



miércoles, 5 de abril de 2023

Dos ausencias

Llego a tu encuentro y pierdo la voz
Fundimos abrazo, no existe rubor
Sé que me entiendes, sobra qué decir
Es el primer día en que vuelvo aquí

La bruma me dice que anda por allí
Flotando en esencias de este sol de abril
Miro al infinito, intento llegar
Y aunque siempre estuviste, no estás

Llega la noche y no duermo
Busco tu rastro y no hay rastro
Lo que ilumina mi rostro
Es tu conversación

Se fundió con el silencio
Tu olor, tu risa, tu llanto
Inolvidables tus cuentos
Tu mirada, tu voz

Cuento dos ausencias, riego descontrol
Abrazo ahora al eco del gato 
Supe contarle demonios, secretos,
y mis ojos trocaron en llanto

Llega la noche y me pierdo
en el sabor del fracaso
restos que implican silencio
son gajes del dolor

Se funden con el olvido
estelas de lo que amamos
tomo las manos del tiempo
con desesperación

Llega el rigor de la aurora
la ciudad se ha reseteado
foco en todo lo perdido
voces que el río llevó

domingo, 5 de marzo de 2023

Creo que las olas soplarán
múltiples secretos de su mar
trato de silencio a lo demás
y queda el susurro

Vocifera, tonta, la tv
y escupe pavadas esta sien
triste analogía que quisiera
gambetear

Quiero enredo en tu callejón
que solo me importe lo que es hoy
pero este latido simpatiza con el ruido

Creo que las olas mostrarán
lúgubres caminos en su andar
trato de encontrarte en mi mirar
y queda solo este absurdo

Vocifera, loca, mi mamá
"Despertate y andá a laburar"
Triste es este nuevo día en que no estás
acá

Quiero vueltas en tu corazón
como calesita es este amor
pero la sortija todo esquiva en este
lío

Creo que las olas hablarán
trataré de escuchar
calla, he venido a contemplar
buscando al infinto
miradas que ya no están



lunes, 13 de febrero de 2023

Veneno
tu dulce resplandor
transitorio 
y amargo sinsabor:
pleamar cuidando tus aguas

Destellos
de luces que se erigen en tu centro
pugnan en tu interior
con recelos de dolor

Siempre te hará mal
lo que no podés cambiar
Siempre encontrarás
en mis ojos ventanal
Vení, asómate y reí

Sabemos
las sombras se camuflan en el Centro
vidrieras, abalorios, sortilegios
irrumpen al calor
de un silencio embriagador

Creemos:
el devenir del tiempo escupe truenos
sobre las manos sucias
de la gente
cuyo goce arranca
flores 

Siempre habitarás 
los refugios que te armás
con restos de corazón
tiza, pizarrón y amor

Siempre invocarás
a esa piba hologramal
que el espejo un día vio

                   


domingo, 15 de enero de 2023

Tanguito de a dos

Quizás yo sea de vos
Tanto como Buenos Aires
Y es que por eso te quiero
Y prefiero odiarte antes que olvidarte 

Dice que es la última vez
Yo descreído de finales
Me apunta a dedo tiznado
Mi cuerpo temblando por cada latido
Y es que prefiero amarte , odiarte, extrañarte
Antes que olvidarte

Súbita voz que borró
pasos de propios andares
Esquinas viejas caminan
solas sin abrigo,
espectros sin aire

Viento que un día se fue
rastros, vestigios, finales
son los destellos del vino
ahogando este frío
sonrisas sin hambre
y es que el dolor se ha tornado
licor del olvido, fiebre de estación.

Desde que se fue, mi corazón
se abrió en dos
y descubrió
todas las miserias de la noche
y la pavada
y en ningún lugar estabas vos

Tarde descubrí que no olvidé,
tarde descubrí que se marchó
y es que cada esquina te recuerda
porque las caminé con vos
y es que el dolor se ha ocultado
licor, dulce amigo, fiebre-corazón.

(en cursiva, lo escrito por mi amigo Fabri)