Al fin
la flor brotó;
besó el aire;
y tus manos, allí...
para recibirla
Al fin mi piel
supo romper
cada cerrojo olvidado
y tus ojos ahí:
cubriéndolo todo
Bailarina de mi corazón
te doy la bienvenida
me arrodillo a tu sonrisa
me desgrano en tu palma
Compañera láser,
atraviesa conmigo
todo muro incongruente,
que seré mil soles para tí,
tarde esfervescente
y luna descarada
(a Melu)
Amigo, como siempre la sutileza de tus versos me llena el alma.
ResponderEliminarUn abrazo a la distancia.